05 Ago Tradición chaqueña: de qué se trata la Bienal Internacional de Esculturas y cómo fue su evento de 2024
Entre 80 y 85 mil personas por día participaron del evento en donde se presentan artistas de varios países para mostrar sus obras.
El ruido de fraguas, bujes, martillos, pernos, sopletes y demás se escucha durante el evento en donde los escultores seleccionados para competir por el premio a la mejor obra de la presente edición, forjan el duro metal.
El Bienal Internacional de Esculturas, creado por Fabriciano Gómez -un romántico escultor- a fines de la década del ochenta es una de las tradiciones más importantes en Chaco. Días atrás se llevó a cabo la última edición, la decimotercera.
Del evento artístico, que se realiza cada dos años, participaron distintas personas de varios países en donde 157 dijeron presente en el Concurso Internacional de Escultura la competencia escultórica y la ganadora fue una mujer -siendo la primera- de Letonia, Solveiga Vasiljeva. Su obra Tiempo, que por supuesto quedará emplazada en alguna calle o plaza de Resistencia, quedó en primer lugar y por detrás, quedaron la ecléctica Multiplicidad, del chileno Alejandro Mardones Guillén y tercera Habitus, Antihabitus a cargo del español Carlos Iglesias Faura.
Previo a la elección final, durante el acto se pudo oír al Ensamble Filarmónico Juvenil; a Sisi Rock y otro impecable Ensamble llamado “Madre Canción”, y dirigido por el cantautor chaqueño Coqui Ortiz. Además, se presentaron Dante Spinetta; grupo Dos Mas Uno y una banda que, como el dúo Tonolec años atrás, se funde con el coro qom Chelaalapí.
Por otro lado, se escucharon palabras alusivas acerca de la Masacre de Napalpí debido a sus cien años. El recordatorio tuvo su extensión por fuera de la Bienal cuando el historiador y ensayista Francisco “Tete” Romero presentó junto a Mempo Giardinelli un libro alusivo, llamado Napalpí, El crimen por la tierra. Genocidio y Terricidio (1924-2024), en la Universidad Popular.
El escultor argentino Alejandro Arce, escultor argentino, presento en la Bienal una obra llamada Animalia, otra de sus obras que representan figuras de animales en peligro de extinción. Hernán Lira mostró al público El Canoero, una obra que representa viejos juguetes mediante un sistema de engranajes de madera.