05 Feb Una réplica del David de Miguel Ángel llega a Resistencia como previa de la Bienal de Escultura Chaco 2024
El próximo 6 de marzo, en la capital nacional de las Esculturas, tendrá lugar la presentación del concurso escultórico internacional que desde hace 36 años es la imagen de marca de la ciudad
Ese día, a modo de lanzamiento de la Bienal de Escultura Chaco 2024 (que este año se desarrollará del 13 al 21 de julio, y en el marco de la celebración de 36 años de concursos escultóricos, será emplazada la copia digital del David de Miguel Ángel, en el parque de las esculturas de la ciudad que alberga los primeros premios de las sucesivas bienales.
La fecha elegida -6 de marzo- es el Día Internacional del Escultor en homenaje al nacimiento de Miguel Ángel.
De este modo, la obra icónica del gran artista vendrá a enriquecer aun más el valioso patrimonio escultórico de Resistencia y una tradición que hunde sus raíces en los años del siglo pasado.
Las Bienales del Chaco -concursos internacionales abierto de primer nivel de escultura a cielo- constituyen un atractivo tanto cultural como turístico para la capital provincial.
El David, como escultura clásica con validación de original, será un hito más para el lucimiento del museo al aire libre que adorna las calles de Resistencia y que ya suma 670 esculturas.
La Bienal de Escultura Chaco se ha convertido en una política de Estado lograda con consensos y mayorías y con protagonismo mixto, público y privado, a partir de la conciencia plena de la importancia del arte en una sociedad; la bienal y la ubicación de esculturas en el espacio público han generado un sentimiento identitario en la comunidad que valora y cuida ese patrimonio.
Dos ejemplos mínimos e incontrastables: las esculturas de Resistencia no están valladas, ni siquiera varias de extrema delicadeza. Por el material o la antigüedad algunas están expuestas en cajas de vidrio, pero siempre a mano del transeúnte. Esto no significa que sean consideradas piezas sagradas vedadas a la cercanía; por el contrario, una postal recurrente es la de las familias que eligen una escultura y hacen acampe a su sombra para la hora de los mates y son “usadas” por los niños para sus juegos… Desde la más tierna infancia los niños se van formando con conciencia del valor del arte, que inicialmente viven como una experiencia lúdica.
Para el público en general, la experiencia de ver trabajar a los escultores -el rigor que exige el oficio, las muchas ciencias y técnicas involucradas (arquitectura, física, ingeniería, etcétera), la complejidad y concentración del trabajo, la demiurgia de hacer surgir del material informe una figura, una imagen, una composición, la vida misma- ha internalizado en el resistenciano el “valor escultor”.
Durante la semana que dura la Bienal, la gente puede acercarse a los escultores, dialogar con ellos, preguntarles sobre su trabajo, hacerles compañía -mate mediante-, pedir autógrafos en los catálogos, sacarse selfies, etcétera.La organización de la Bienal dispone traductores para los artistas extranjeros que no hablan castellano. Asistir al nacimiento de una obra de arte es una experiencia que deja huella y anécdotas para compartir. Y el Chaco ya tiene varias generaciones de ejercicio y cercanía con la escultura, y la identidad, amalgamada por el tiempo.
La cercanía y el afecto de la gente es quizás el valor más singular de esta Bienal y de ello dejan testimonio los escultores invitados: “La magia de venir al Chaco es encontrarse con su gente”.
Todas las obras que se producen en el gigante taller al aire libre son instaladas en el espacio público, enriqueciendo el museo al aire libre con piezas representativas de escultores contemporáneos del mundo.
Este año se recibieron postulaciones de 157 escultores de 55 países. El prestigio adquirido por la Bienal Chaco atrae el interés de renombrados artistas de la escena internacional. El 6 de marzo se dará a conocer la lista de los diez participantes seleccionados y sus países de origen.
También se comunicará la lista de artistas que participarán del Encuentro de Escultores invitados Argentinos y Latinoamericanos, que se desarrolla en paralelo al certamen principal. Otro clásico de la Bienal es el Premio Desafío, del que participan estudiantes avanzados de escuelas de arte del país: estos jóvenes, futuros docentes o escultores, competirán realizando una escultura por equipo/provincia, y al mismo tiempo podrán conocer e interactuar con los grandes maestros escultores que estarán trabajando en el mismo predio.
El programa complementario de la Bienal 2024 incluye actividades como la “dimensión Artesanía” que convocará a unos 360 artesanos; la “dimensión Académica” (charlas, conferencias, talleres), la “dimensión Escénica” (cada noche en el escenario de la bienal habrá espectáculos artististicos), la “dimensión Musical”, de la mano del Festival filarmónico juvenil, de carácter internacional con la participación de más de un centenar de músicos jóvenes que durante la bienal, serán capacitados por prestigiosos profesores, músicos e integrantes destacados de orquestas culminando con un concierto en el Domo del Centenario; finalmente, la “dimensión Ferial”, con más de 600 expositores de todo el arco de la industria y el comercio chaqueños y regionales.
Si Resistencia podrá contar con este gemelo del David de Miguel Ángel es, en palabras de José Eidman, presidente de la Fundación Urunday, “gracias al acompañamiento de la UNA (Universidad Nacional de las Artes) y el Museo de la Cárcova, a la ejecución de vanguardia digital en Argentina de las artistas Gisela Kraisman y Denise Di Federico, a la par del arco curatorial de grandes referentes del arte argentino y al compromiso de universidades, empresariado, instituciones de la cultura”.
“Fue un logro plural para que esta pieza cumbre del Renacimiento italiano venga a vivir entre nosotros”, agregó Eidman y sumó una invitación “a vivir la experiencia de la Bienal del Chaco , durante el templado invierno chaqueño, justo cuando florecen los lapachos llenando de sombrillas rosadas la ciudad”.